Riqueza de los Osuna se apoyó en arrendamientos agrícolas en Écija, Utrera y Osuna. Los libros de casa conservados en el Archivo Ducal de Osuna recogen cómo los cánones financiaban palacios y colecciones. Pero las crisis de cosechas de 1857 y 1867 redujeron los ingresos en un 40 %, según los propios administradores.
Campesinos y mayorales declararon ante comisiones de Hacienda que el dinero salía hacia París para cubrir el dandismo del XII duque. Las cifras son reales, las tensiones también. La riqueza extrema chocaba con la ruina que se acercaba.